Sobre mis días y mis idas

Con tanto que decir, tanto tiempo para escribir, y tan pocas palabras para expresarlo ...
Hace días llevo a cuestas una carga más o menos pesada, una extraña enfermedad que me tiene un poco agobiada, una duda que me quiebra la esperanza, una ilusión, una decepción, múltiples dolores en la espalda, y la promesa de volver pronto a "mi" casa.
Ayer, unos tipos se venían agasajando en el camión, por desgracia se sentaron junto a mi (uno sobre la otra) y por poquito y me hacen parte de su festín. Inmediatamente me acordé de las "cosas molestas" de las que escribió Charles en su blog :P
Últimamente me he dado a la tarea de desvelarme y no dormir más de lo necesario, aunque creo que mi cuerpo no está del todo conforme y me cuesta levantarme temprano.
A ratos pierdo el apetito (cosa muuy rara en mi) aunque creo que eso me ha mantenido consciente por más tiempo. Eso de amanecer y sólo pensar en el desayuno no es algo que me agrade.
La siguiente semana comenzará mi séptimo y penúltimo trimestre, uno de los más "pesados" según las malas lenguas, y con él, un tiempo indefinido de esclavitud repartido entre la escuela, el servicio social y el trabajo. A pesar de todo, me parece divertido.
No sé si deba escribir todo lo que ha pasado por mi mente en las últimas semanas, siento que lentamente mi vida ha dado giros que no esperaba, y francamente me tiene fascinada el posible desenlace. Ya contaré si fue de mi agrado o me ha hecho huir de la comarca.
En fin, ya es tarde para andar por estos lares (si como no), o más bien, ya no tengo más tema de conversación.
Buenas noches y buen día.

Renacer

Algunas veces mi corazón se negó a quererte,
prefiriendo olvidar cada momento que me enseñaste a vivir,
pero en silencio grité tu nombre para no perderme en la agonía,
porque sin ti, los recuerdos no valían,
y sin ellos se enviciaba mi razón.


Algunas noches me obligué a dormir para no pensarte,
pero hasta en mis sueños te veía,
era inútil pretender que me alejaría de ti.


Algunos días se cruzaron nuestros pasos por la vida:
encuentros furtivos, palabras al aire, sonrisas distraídas …
y la pregunta siempre presente que me invitaba a partir.


Otros días (uno, dos, tres de ellos), la cuerda se cimbraba y casi nos hizo caer.
Otras noches, cargadas de misticismo y pasión, te soñaba aún despierta y no fue necesario dormir.
Otras veces, las más memorables sin duda, cada frase fue cambiando el panorama, y los cuerpos hablaron su lenguaje pero nadie los oyó reír.


Es por esas noches que he decidido escribirte,
por cada verso que jamás recibiste de mi.
Es por este momento en que te tengo tan cerca pero no te puedo tocar,
que me obligo a pensarte más a fondo, a recordarte, a dibujarte,
a creer que estás conmigo aunque sé que no es así.
Y es por esos días, y también por el hoy,
que he decidido dejar de olvidarte,
a menos que tú sepas cómo te expulso del corazón ...



... al eterno dueño de mi confusión.

¿Y cómo llegamos a esto?

Como muchas otras cosas que he hecho y jamás contemplé la posibilidad de envolverme en ellas (tales como el ballet, el coro de la secundaria y el diseño de modas :P), este blog es la repuesta a una solicitud muy poderosa, que después de medio pensármela y batallar largo rato con la creación de la cuenta, cha chán! apareció en la red.
Claro, aún me falta una centena de arreglos que hacerle y la verdad no sé ni por dónde empezar, pero tenía muchas ganas de por lo menos presentarme y saber de qué va esto (si señores, ni yo misma lo sé), y espero acomodarme a este sitio muy pronto.
Sin más, que tengan un buen día y encuentren cosas interesantes que leer ;)
Ah! y antes de que se me olvide, un agradecimiento a mi maestro por su curiosa insistencia (literalmente, sin ti esto no sería posible) y al querido Charles, que por ahí tiene un blog que me encanta visitar (cuando descubra cómo, haré la labor de poner el link del blog de ambos :P).
Hasta pronto!